Las redes sociales amanecieron este domingo plagadas de fotografías en blanco dónde apenas se percibían las formas, figuras ni el lugar. ¿Un concierto de Izal? En realidad no. Se trata de la última instalación llevada a cabo por la galería de arte Tate Modern de Londres, a través de la cual, sus responsables quieren sensibilizarnos sobre las consecuencias del aumento de la contaminación en las grandes ciudades.
Esta acción disruptiva coloca al viandante frente a la galería entre un manto de niebla. ¿La sensación? No se puede ver absolutamente nada. Esta muestra quiere ahondar sobre las consecuencias del aumento de la polución en las grandes ciudades y su repercusión en el cambio climático.
Pero sobre todo, quiere sensibilizar a los ciudadanos para que incorporen a sus hábitos urbanos costumbres más saludables y responsables. Para que se conciencien, por ejemplo, sobre los beneficios de ir en bici a trabajar.
El mundo en el que vivimos exige a las grandes empresas sumarse a estos retos mundiales de compromiso para disminuir el calentamiento global. Pequeñas acciones que suman. Porque convertir la monotonía de ir al trabajo en un agradable paseo en bicicleta reduciría la polución urbana en un 23%, tal y como explica la consultora medioambiental Green Globe en su guía práctica de sostenibilidad para Pymes.
Montar en bicicleta está en boga. Cada vez más personas son conscientes de sus beneficios y cómo esta forma de desplazarnos por las ciudades reduciría la polución, contribuiría a disminuir la emisión de los gases de efecto invernadero, y además, mejoraría nuestra salud cardiovascular.
Evitar el aumento del calentamiento global es un asunto que une cada vez a más personas. No olvidemos que ya existen clubs de ciclismo urbano, charlas en los gimnasios sobre los beneficios de hacer bicicleta a diario, y rutas seguras con el trazado de un agradable paseo en bicicleta por las ciudades.
No se trata de un asunto baladí
Las consecuencias de no sumarnos al reto de la sostenibilidad y conseguir unos distritos financieros más eficientes afectan a toda la sociedad en su conjunto. Tal y como resalta el último informe Outlook 2017 de Ecoinnovación, elaborado por la Fundación Fórum Ambiental y la Fundación "la Caixa", en el que se prevé que en el año 2100 la población mundial habrá aumentado hasta alcanzar los 12.300 millones de habitantes.
Esto quiere decir, según dicho informe, que el impacto de las actividades humanas en nuestro entorno será cada vez mayor porque aumentará el consumo de recursos, el gasto energético, la generación de residuos, y cómo consecuencia de todo ello, también aumentarán las emisiones de gases de efecto invernadero.
Aunque evitarlo es un reto que exige constancia cada día del año, el Día del Medio Ambiente el pasado 5 de junio ha sido una buena fecha para comenzar a incorporar hábitos más saludables: el consumo responsable de agua, un uso racional de la energía eléctrica, una cultura del reciclaje más global, y el uso de otras alternativas para desplazarnos por la ciudad como montar en bicicleta, lo que ayudaría a reducir significativamente nuestro impacto sobre el medio ambiente.
Apostar por una transparencia empresarial en materia medioambiental es la nueva tendencia corporativa. Las personas queremos trabajar en empresas sostenibles, queremos estar orgullosos de los lugares en los que desarrollamos nuestra carrera profesional y sentir que la empresa cuida no solo de nuestro talento, también nuestra calidad de vida.
Súmate al reto y conoce los 7 beneficios de ir al trabajo en bicicleta:
Ya te hemos dado al menos 7 motivos para ir a trabajar en bici. ¿A qué esperas para empezar? Nuestro consejo: ¡No dejes para mañana empezar a pedalear hoy!