Por Ximo Salas
Es posible que algo este cambiando, pero lo hace en España de una forma muy lenta y poco constante, no cala en las empresas de la misma forma que lo hace en la sociedad que les rodea: ¿Cuál es tu situación? ¿Está cambiando tu trabajo y tu entorno? ¿Estás preparado para el nuevo cambio económico en España?
Richard Thaler (Nueva Jersey 1945), premio nobel de economía 2017, por sus "contribuciones a la economía del comportamiento" ("behavioural economics"), es conocido también por la aplicación de la “Nudge theory” o teoría de los “pequeños empujones” en el comportamiento económico de las personas. R. Thaler Publicó en 2008 el libro “Nudge: Improving Decisions about Health, Wealth, and Happiness”, desarrollando este principio.
Thaler define los “empujoncitos” como "una característica del ambiente que cambia el comportamiento de los humanos pero no cambiaría el comportamiento de los agentes económicos racionales". Algo así como implantar pequeños cambios en los entornos de las personas que les inducen a cambiar de comportamiento de forma voluntaria y simple, para conseguir una ventaja o un beneficio.
Podemos leer ejemplos de la aplicación de esta teoría en la gestión de trabajadores de Google, explicados por Lazlo Bock en el libro “La nueva fórmula del trabajo” (Conecta, 2015). Por ejemplo, L. Bock explica cómo implantan pequeños cambios en algunas oficinas de Google para mejorar los hábitos alimenticios de los empleados. Sus detractores hablan de “manipulación” del individuo, aunque renunciar a los cambios es fácil y el objetivo a conseguir es beneficioso para la persona. Vosotros/as decidís.
Vamos a lo que nos importa, consiste en aplicarnos esta teoría a nosotros mismos y provocarnos pequeños cambios en nuestro comportamiento y en nuestro aprendizaje, que tengan como objetivo mejorar nuestro perfil profesional ante los cambios que estamos viviendo.
¿Cómo puedo iniciar mi cambio profesional? ¡5 empujoncitos!
Mira a tu alrededor, no creas que todo lo que ves es inamovible, pregunta y analiza lo que estás haciendo y qué sentido tiene para la empresa y para que tu contribuyas al cumplimiento de sus objetivos.
Si piensas que por repetir las tareas tal como te las enseñaron y obedecer a tu superior sin el menor pestañeo será una buena estrategia para mantener tu puesto de trabajo, estás muy equivocado. ¡Diferénciate! Todo lo que pierda personalidad podrá ser sustituido por la acción de otra persona y en el mejor de los casos por una máquina.
Nota: No olvides que se trata de un pequeño empujón, así que cuestiónate cada día con los pequeños detalles. Aprende cómo diferenciarte
Compartir conocimientos en el trabajo: Aprender es un verbo para conjugar y compartir
A esto le deberíamos llamar “Curiosidad Aplicada”. Ni planes de formación, ni carreras diseñadas para la generalidad, huye del café para todos, del que pretenden que tomes de forma obediente para conseguir que la tensión arterial de todos sea la misma.
Toma tus propias decisiones de aprendizaje y crea tu propio entorno personal, abre los canales que necesites, busca contenidos, clasifícalos, coméntalos y sobre todo compártelos con tus compañeros.
Nunca pierdas la curiosidad por aprender, no te quedes solo con el aprendizaje, piensa que si lo compartes conseguirás hacer de él algo colectivo, que te permitirá mejorar tu posición frente a los demás, exponer tus conocimientos. Y además, te mantendrá en constante evolución, ya que siempre necesitarás ese grado de avance para estar al día.
Toma en serio la opción de poner en valor todo lo que sabes y sientes (esta última parte es fundamental), actívalo, cuéntalo, escríbelo y confía en ti. No te “aborregues”.
Nota: Este pequeño empujón se construye cada día, por ejemplo leyendo este post y si te gusta, si te sirve, si has aprendido algo en su lectura, comparte con el mejor de tus compañeros.
Déjate de monsergas, no me hables de que tus jefes no te motivan, de que la motivación de tu grupo es baja o de que tu entorno no te ayuda positivamente.
La construcción de un entorno motivador depende también de ti y de los pasos que des para entender cómo tu trabajo contribuye a mejorar la vida de otros. Si además ayudas a mejorar el entorno de tus compañeros sentirás una mayor satisfacción, ese puede ser el truco.
Ser agradecido. El agradecimiento lleva de acompañante la satisfacción, la generosidad y la amabilidad. Plantearse por un minuto qué cuesta ser amable y generoso en el trabajo no requiere ningún esfuerzo y el retorno es infinito.
Nota: No pretendas resolver todos los problemas del mundo el primer día, recuerda que solo necesitas un pequeño empujón, así que limítate a sonreír y dar las gracias si no te sale otra cosa.
En muchas ocasiones nos comportamos en el colectivo de la empresa como zombis que solo pretenden contentar a los demás, agradar al máximo a jefes y jefecillos que supuestamente reirán nuestras gracias, premiarán la fidelidad y castigarán el error.
Agita tu bandera, sé razonable pero asertivo, nunca conformista. Nada te hará mejor profesionalmente que ser tu mismo, para lo bueno y para lo malo. Así que la peor receta es mirar hacia otro lado cuando lo que está ocurriendo no es correcto o la información que se proporciona es errónea. Vivimos en un mundo donde la información está por todas partes y sin embargo no somos capaces de verificar nada, dando por bueno casi todo lo que nos ofrecen. No seas de esos.
Nota: Cada día y como un pequeño empujón cuestiónate algo que los demás den por cierto, verifícalo. Acude a las reuniones con la información adecuada, no improvises.
¿No te gusta este mundo rápido y en constante cambio? No pasa nada, no importan tus gustos, la tierra seguirá girando a la misma velocidad independientemente de tu opinión; la sociedad que te rodea seguirá tan “loca” como quiera, no lo podrás parar.
Sin embargo eso no significa que debas aceptar ese credo y resignarte a vivir en un caos que no te gusta, lo único que debes hacer es sentirte cómodo/a. Cuando alguien quiere sentirse bien en un lugar aunque este no le guste, lo que debe hacer es conocerlo y dominarlo.
La evolución digital de la sociedad y del trabajo, las opciones de dar a conocer tus conocimientos y capacidades, la exposición que te permite Internet en tu campo profesional, no es algo para dejar de lado: Conócelo y domínalo. Hazte visible, camina hacia tu objetivo usando todos los medios que ahora te ofrecen las nuevas tecnologías, no renuncies a construir tu propia reputación profesional.
Nota: No es necesario que te crees un perfil en cada red social, dar un pequeño empujón a tu perfil digital cada día es tan sencillo como no renunciar a usar y conocer lo que te ofrecen.